Sobre mí y mi historia familiar: Benlly
En esta sección de mi web, no quiero que conozcas solo mi currículum, sino mi historia, mi linaje y los momentos clave que marcaron mi vida, tanto para enseñarme y formarme, como para mejorar y evolucionar.

En 1750 el Rey Fernando VI otorgó, a mi antepasados, el título nobiliario de Hidalgos de Linares. Hoy, como heredero de ese título, mi misión es honrar ese legado llevando la excelencia y la visión de mi familia al mundo empresarial y educativo del siglo XXI. (En honor a mi abuelo D. José María García-Luengo Tost)
Mi historia comienza en Crecente, un pequeño pueblo de la zona sur de la provincia de Pontevedra. Ahí pasé mi infancia con mi familia hasta que tenía 13 años en nuestra noble casa en la que hemos vivido 4 generaciones de Hidalgos y que ahora he convertido en hotel.
A esa edad llega mi primera lección de vida. Me voy a estudiar interno a un colegio de Ourense. En esa etapa entendí realmente lo que era compartir, y no solo habitación, sino también experiencias, confidencias y aventuras.
Tras finalizar esa etapa, decido comenzar mis estudios universitarios de Dirección Hotelera en una de las mejores escuelas de España y ahí empieza una época llena de nuevos retos, experiencias y aprendizajes.
En mi etapa de prácticas, conozco nuevas personas y viajo a lugares como Madrid, Londres o Menorca, lo que, irremediablemente, supone empaparme de nuevas experiencias enriquecedoras, valores y vivencias. Además de entender la importancia de lo que te enseñan los demás desde su experiencia, tanto amigos, como clientes, o jefes.
En esta etapa comienzo a dar, casi sin darme cuenta, mis primeros pasos para formarme como directivo.
Mi camino profesional y personal sigue avanzando y, en 2002, tras finalizar mis estudios, surge la oportunidad de trabajar como director adjunto e inaugurar el Meliá Mérida, el primer cinco estrellas de Extremadura. En esa época tenía 24 años y ya estaba en mi primera dirección , dentro de una gran compañía como es Meliá Hotels International. Todo un sueño para un chico de esa edad.
En esa etapa me encargo de gestionar un gran equipo que tengo a mi cargo, y poner todo a punto para que funcione a la perfección, cuidando hasta el más mínimo detalle.


Dos años más tarde, me surge una nueva oportunidad, que es el reto y responsabilidad de trabajar en la Dirección General de Turismo de la Junta de Extremadura llegando a ser Director General de Empresa Pública, con un equipo de más de 100 personas.
Es ahí donde empieza mi época como alto cargo en la administración pública, con tan sólo 26 años. Gracias a esta etapa, brota el gran aprendizaje de llevar, dirigir, ayudar y guiar a equipos grandes. Ampliando mi formación varios master de liderazgo, psicología, coaching, pnl y un MBA Executive.
Sin embargo, en el año 2010 llega mi gran brecha, ese momento en el que todos nos rompemos de repente y sin poder evitarlo en mil pedazos. Ese momento en el que no importa lo fuerte o grande que seas, que te desvaneces en segundos como si fueses espuma de mar.
Le detectan un tumor a mi padre, y todo mi mundo se desploma.
Tras el shock inicial, toca asumir y enderezarse, afrontar la situación y recorrer el árido y difícil camino que supone todo el proceso de quimioterapia.
Y es entonces cuando entendí aquello de que, en la oscuridad más profunda, es donde a veces, surge la luz más brillante.
Con el fallecimiento de mi padre llega el dolor más intenso, pero también mi mayor aprendizaje.
Aprendo que, a veces, es necesario perderse para encontrarse, romperse en mil pedazos para reconstruirse y resurgir de nuevo con más fuerza y encontrándote a ti mismo.
Culmino descubriendo al Benlly que realmente quiero ser, a decir que no a lo que no quiero y convencerme de que, si quiero, puedo. Entendí que mis metas solamente me las ponía e imponía yo, y que, lo que diferencia un fracaso de una meta, muchas veces, es el propio miedo interior a no conseguirlo.
Decido emprender mi camino más vocacional, donde convierto mi pasión y vocación en mi profesión.


Quiero dedicar mi vida a formarme como mentor, a empaparme de todo lo que ello supone y a crecer profesional y personalmente. Me doy cuenta de que quiero buscar mi felicidad enseñando a los demás y que no quiero renunciar a ella.
Es en ese momento cuando me despido como alto cargo y renuncio a la excedencia como directivo hotelero en Meliá y me voy rumbo a Estados Unidos, a estudiar marketing digital.
Allí me formo sin parar con mis mentores y viajo a Miami, San Diego, Colombia, Argentina, México y mi amado Brasil.
Así voy esculpiendo y haciendo cada vez más mía esa vocación de ayudar a los demás, no solo laboralmente sino también personalmente.
Me doy cuenta de lo importante que es que ambos aspectos crezcan de la mano y a la par, el profesional y el personal, ya que, uno no se entiende sin el otro y ambos se complementan entre sí.
Decido dar un paso más y darle una forma más material y humana a todo ese entusiasmo, aprendizaje y sabiduría y es cuando decido crear el CLUB DE MARKETING GLOBAL, junto a mi socio Álvaro Mendoza, siendo un gran éxito nuestro lanzamiento en el que batimos nuestros récords de facturación.
Empieza una emocionante etapa, en la que se refleja que la mejor forma de trabajar y lo relevante que es el entusiasmo, la verdadera vocación y el conocimiento.
Y entiendo la importancia de los valores y del legado familiar del que durante años intenté escapar, pero cuya responsabilidad cada vez sentía más próxima y necesario asumir, aunque aquí todavía no era el momento.


En 2017 arranca el Club de Marketing, alcanzando el éxito esperado tras tanto entrenamiento. Con nuestro primer lanzamiento online en 2018 logramos más de medio millón de dólares facturados en una sola semana, mientras yo seguía formándome, entrenándome y creciendo de la mano de los mejores.
A partir de 2019 llegaron las oportunidades de trabajar como consultor estratégico y formador en grandes proyectos para compañías como DKV Salud, Remax España o el Grupo AMIR, liderando iniciativas con facturación millonaria y ayudando a diseñar e impulsar estrategias de marketing y ventas. Como consultor especializado y mentor, acompañé a los equipos para que fueran más eficientes, estratégicos y de alto rendimiento.
No solo asumí consultorías estratégicas, sino que fui el creador y el primero en llevar la psicología al corazón de la empresa, aplicándola al marketing y la comunicación. Ese enfoque innovador dio forma a mis proyectos de consultoría, mentoría y formación, generando un impacto real en el crecimiento de las compañías bajo un modelo de marketing human to human.
En 2020 di un paso decisivo al crear el Título de Experto Universitario en Psicomarketing & Business Growth, en colaboración con AMIR-UDIMA. Este programa, pionero en la aplicación de la psicología a la empresa, fue reconocido con varios galardones a la Excelencia Educativa y confirmó una convicción que guiaría todo lo que vendría después: el futuro pasa por entender a las personas antes que a las métricas.
Y, sin ser aún del todo consciente, en ese mismo año ya tenía los apoyos y la visión necesarios para dar el salto y lanzar mi gran proyecto.
Hoy soy fundador y CEO de Postgradum, institución educativa con aval universitario internacional, que forma parte de un grupo de inversión de la nobleza gallega, vinculado a los Hidalgos de Linares. Con el apoyo moral y económico de mi Hidalga Madre, en 2020 emprendí este proyecto, que hoy cuenta con dos sedes principales en Madrid (Torre KPMG en la Castellana y Postgradum Hub en Ventas) y una sede administrativa en Galicia. En tan solo cinco años hemos consolidado un crecimiento firme y sostenido, con resultados de varios dígitos anuales, que reflejan tanto la solidez del proyecto como su liderazgo en la formación farmacéutica y sanitaria.
Provengo de una familia fuertemente ligada al ámbito empresarial y sanitario, especialmente a la farmacia. Mis hermanas son farmacéutica y enfermera, mi marido, Fran Dieguez, también farmacéutico, ocupa hoy un puesto directivo en Postgradum, aportando su experiencia y compromiso. Otros familiares han dedicado su vida a la medicina y la enfermería, lo que me inspiró a conectar la gestión con el sector farmacéutico y sanitario, proyectando así nuestro legado familiar hacia el futuro.
Con una tradición empresarial que ya alcanzamos la cuarta generación, decidí ampliar ese legado hacia tres ejes estratégicos: la formación con aval universitario internacional especializada en farmacia y salud, la consultoría para el sector farmacéutico y la hotelería vinculada al cuidado del patrimonio familiar. A lo largo de nuestra trayectoria, hemos sido distinguidos con más de una decena de reconocimientos, que avalan nuestro compromiso con la calidad, la responsabilidad social y el impacto positivo en la sociedad.
Mi propósito es claro: honrar mi herencia familiar y contribuir al progreso colectivo a través de la educación, la innovación y un liderazgo con impacto real.
En Postgradum apostamos por una educación con propósito y por un crecimiento que transforme la vida de las personas, especialmente en el ámbito de la farmacia y la salud.
